La llegada de inmigrantes ha sido imprescindible para completar la pasada década de bonanza económica, y lo seguirá siendo en el futuro para garantizar la viabilidad del sistema de pensiones actual. Según los últimos cálculos de la Comisión Europea, España necesita recibir al menos siete millones de inmigrantes en los próximos 20 años para que su tasa de dependencia (que mide el número de pensionistas frente a los activos) se quede en el 34%, es decir, que por cada 100 personas que trabajen haya 34 jubilados. Público.es